Más que el contrato electoral, el gobierno puede romper el contrato social
Rubén Weinsteiner consideró que las medidas contra la clase trabajadora anunciadas por el gobierno de Javier Milei, van hacia la ruptura del contrato social, que llevará a la clase media a manifestarse.
Contrario a lo que sus votantes esperaban, el gobierno de Javier Milei, y su ministro de Economía Luis Caputo, anunciaron medidas de ajuste que lejos están de caer sobre la "casta" o la clase política, y más bien vuelven a golpear el bolsillo de la clase trabajadora, que puede sentirse "traicionada" o "decepcionada".
El consultor en Comunicación Política, Rubén Weinsteiner, en su columna semanal de todos los miércoles en Código Baires, consideró respecto de esto que el gobierno de Milei, además del contrato electoral, corre "riesgo de ruptura del contrato social", por las chances de que la clase media salga a reclamar por sus derechos.
En ese sentido, consideró que los medios cercanos al gobierno plantean "algo que no es cierto", que es que Milei "avisó que iba a hacer esto", y afirmó que "Milei dijo siempre que el costo lo iba a pagar la casta, la política, y los que lo votaron lo hicieron pensando eso, cuando siempre fue mentira"
"El plan que nos propone es simplemente táctica, no hay nada de estratégico, de mirada de desarrollo a futuro, y la motosierra se transformó en una licuadora, porque a lo que apunta es a licuar todo con la inflación, pero no hay un corte significativo en nada", agregó Weinsteiner.
No obstante, enumeró también otras premisas que prometían en campaña, como la eliminación del Banco Central, o la dolarización, que parece que no se harán, y agregó que "a Caputo lo trajeron porque era 'el Messi de las leliqs' y eso tampoco se va a hacer".
Por esto mismo, consideró que se corre riesgo de una ruptura del contrato social, ya que "cuando la clase media se vea impedida de acceder a sus derechos básicos va a ser ella la que corte la calle".
Por otro lado, observó que la oposición "por ahora ha sido prudente", y que "el radicalismo volvió a convertirse en furgón de cola, esta vez de La Libertad Avanza", ya que, como mencionó en otras columnas "(la UCR) es un partido que ha dejado de construir poder, se dedica, exclusivamente, a consumir poder".
Ante esta situación, sostuvo que "el gobierno debería entender que ante una de las situaciones más dificiles de la historia argentina necesita construír consensos y tener a la oposición de su lado, no en contra", y que "debería tener una mirada más pragmática, política, pensando en la articulación y el soporte que va a necesitar no sólamente en los medios sino en la política para poder llevar adelante este tipo de cambios".