Donación de órganos: Desde CUCAIBA desmintieron los dichos de Milei

Durante el debate presidencial, Javier Milei criticó la supuesta ineficiencia del sistema de donación de órganos del País, al tiempo que acusó al Centro Nacional Central Único Coordinador de Ablación e Implante (Incucai) de corrupción. 

Milei fundamentó sus dichos postulando de "hay 7000 personas esperando un trasplante y 300.000 potenciales donantes, y algo que no funciona en el medio". Información que resulta rotundamente falsa, debido a que no se contempla que para que una persona pueda ser donante de órganos se deben compilar ciertas características que no se dan en todas las muertes, así como también un riguroso protocolo que se encuentra regulado por la ley. 

A raíz de esto, el presidente del Centro Único Coordinador de Ablación e Implante de la Provincia de Burdeos Aires, Francisco Leone expuso la falsedad de los dichos del candidato presidencial de La Libertad Avanza. 

“Uno se podría preguntarse por qué si está ese número mágico que se planteó ayer en el debate de 300.000 muertos por año en la Argentina, porque no hay tantos donantes. Esto pasa porque hay una complejidad que significa que no todos los muertos son donantes a priori”, precisó Leone.

En esa misma línea, el titular de la CUCAIBA precisó que Milei se tendría que haber preguntado “cómo deberá ser la complejidad del tema para que habiendo 300.000 muertos no se puedan generen la cantidad necesaria de órganos procurados”. 

“Generar un órgano para trasplante en un paciente fallecido tiene una enorme complejidad, que significa una organización importante. Tenemos mucha gente que está las 24 horas del día preparadas para generar la procuración de estos órganos y tejidos necesarios para la Argentina en este momento”, declaró Leone.

En lo que refiere a la falsedad de los dichos de Javier Milei, los funcionarios del ministerio de Salud explicó que “de los 300.000 fallecidos, para que uno pueda aspirar a ser un donante tiene que estar institucionalizado, es decir que tiene que estar internado en algún centro de salud al momento del deceso”. 

En este sentido, cabe aclarar que existen dos tipos de donantes, de tejidos y de órganos, siendo estos últimos lo más escasos a causa de la gran complejidad y la multiplicidad de factores que se tienen que dar para que los órganos sean viables. 

“Para un donante de órganos se necesita que previamente ese paciente haya sido internado en una terapia intensiva, para lo cual de los 300.000 fallecidos, los institucionalizados en una terapia intensiva son alrededor de 3 mil pacientes anuales”, precisó el Presidente de CUCAIBA.

Y añadió: “De esos 300.000 que están en una terapia y fallecen solo el 2% son los que tienen posibilidad de poder ser donantes una vez que al paciente se le hace el diagnosticó la muerte, después hay que mantener el potencial donante hasta el momento de la ablación, para lo cual hay un proceso jurídico en el medio”.

Por otro lado, Milei durante su intervención también había hablado de la supuesta corrupción existente en el manejo del sistema de trasplante de órganos, a raíz de lo cual Leone recordó que toda la actividad se encuentra regulada por la Ley.

“Está todo establecido en la Ley 27 447, esto es otra cuestión que además los legisladores lo conocen porque las votaron, hay una ley que regula esta actividad y es una ley muy reglamentarista, la cual inclusive establece cuáles son los criterios que nosotros tenemos que tomar para establecer una muerte”, declaró el Titular de la CUCAIBA.