El Senasa emitió recomendaciones para la prevención de la triquinosis

Partiendo de la base que la triquinosis es una zoonosis que puede transmitirse de animales a personas y que los caso de la misma ya se extendieron a varias zonas del país, entre ellas la provincia de buenos Aires, el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) emitió una serie de recomendaciones para su prevención. 

Cabe destacar que se trata de una enfermedad puede afectar a aquellos que consumen carne insuficientemente cocida o productos elaborados con carne de cerdo o de animales silvestres, como jabalíes o pumas, que contienen larvas del parásito en sus músculos.

La principal fuente de infección para las personas es el consumo de carne de cerdos domésticos, aunque también puede transmitirse mediante el consumo de otras especies silvestres.

 Según el Senasa, los síntomas de la triquinosis en humanos son inespecíficos y similares a los de una gripe, incluyendo fiebre, vómitos, diarrea, dolores musculares, entre otros. Por lo tanto, desde el Organismo precisaron que es crucial asociar los síntomas con los alimentos consumidos y buscar atención médica de inmediato.

Recomendaciones para la producción de alimentos: 

Dado el significativo consumo de productos elaborados con carne de cerdo y sus derivados en Argentina, como chacinados, embutidos y salazones, el Senasa calificó como esencial que los criadores de animales mantengan condiciones higiénicas adecuadas y proporcionen una alimentación adecuada en sus establecimientos.

Es importante destacar que la triquinosis no se propaga de un cerdo a otro, sino que los animales pueden contraer a través de su alimentación. Por esta razón, mantener una alimentación segura para estos animales y sus productos derivados es crucial.

Actualmente, el Senasa registra 652.462 unidades de producción ganadera con animales declarados. De este total, 74.461 unidades tienen cerdos, y de ellas, 36.276 unidades, es decir, el 76%, están involucradas en una "actividad familiar" que alberga 698.327 cerdos. 

Estos animales suelen criarse en espacios abiertos, con el objetivo de obtener lechones para la venta y otros fines relacionados con su engorde. Las principales provincias con unidades productivas que realizan esta actividad son Buenos Aires (15.6%), Córdoba (13.3%) y Chaco (11.8%).

 A raíz de esto, el Organismo recomendó controlar y prevenir la entrada de roedores en estos establecimientos, ya que pueden portar larvas de trichinella que los cerdos pueden ingerir. Dado que los síntomas de esta parasitosis no son visibles en los cerdos, se deben realizar controles en laboratorios para confirmar la ausencia de la enfermedad.

En este sentido, la prueba de digestión artificial desempeña un papel crucial en la prevención de esta zoonosis. Como la enfermedad solo se puede diagnosticar después de la faena, esta prueba permite detectar la presencia de trichinella en una muestra de carne, analizada en un laboratorio autorizado. Esto garantiza la aptitud de la carne para el consumo.

Recomendaciones para el consumo:

Otro aspecto esencial en la prevención de la triquinosis son las medidas que los consumidores deben tomar al adquirir productos alimenticios a base de cerdo y sus derivados elaborados con carne cruda.

En este marco, el Senasa recomienda que a la hora de comprar estos productos, es más seguro darle preferencia a establecimientos certificados y habilitados para su elaboración. Aquellos que consuman alimentos derivados de cerdos o animales silvestres deben verificar la identificación de los productos a través de las etiquetas que certifiquen su origen.

Además, se aconsejó cocinar adecuadamente la carne hasta que su interior deje de ser rosado, lo que indica que se ha alcanzado una temperatura suficiente para eliminar las larvas que transmiten la enfermedad, generalmente mayor a 70 grados centígrados durante varios minutos.