Cada vez más familias recurren a tarjetas de crédito para comprar en el supermercado

El reciente informe de ventas en supermercados publicado por el Indec puso de manifiesto una nueva caída en los niveles de comercialización, revelando así el impacto continuo de la recesión económica en Argentina. Al profundizar en las estadísticas, dos datos resaltan la gravedad de la situación: el aumento significativo en el uso de tarjetas de crédito para las compras y las sombrías perspectivas comerciales.

Según el informe del Indec, en febrero de 2024, las ventas totales en supermercados a precios constantes experimentaron una disminución del 11,4% en comparación con el mismo mes del año anterior. En el acumulado del primer bimestre, esta merma alcanzó el 12,7%. Estas cifras no son sorprendentes dada la significativa disminución del poder adquisitivo del salario mínimo y las jubilaciones mínimas en el período analizado, con caídas del 20,6% y 34,4% respectivamente, según un informe del Foro Economía y Trabajo (Foroeyt).

El uso de tarjetas de crédito en las transacciones comerciales experimentó un aumento notable. En febrero de 2024, las ventas efectuadas con tarjeta de débito representaron el 31,5% del total, con un aumento del 277% en comparación con el año anterior. Por otro lado, las ventas a precios corrientes abonadas con tarjeta de crédito constituyeron el 40,5% del total, con un incremento del 329% en relación con febrero de 2023.

Los aumentos interanuales en el uso de tarjetas de crédito fueron significativos en los últimos meses, con incrementos del 173,1% en noviembre, 243,3% en diciembre y 292,3% en enero. En comparación con febrero de 2023, el uso de tarjetas de crédito ha aumentado del 35,7% al 40,5%, representando un crecimiento del 111,7% en términos nominales.

Además, ciertos grupos de artículos han experimentado aumentos significativos en las ventas en comparación con el año anterior, incluyendo "Panadería" (341,5%), "Artículos de limpieza y perfumería" (337,1%), "Almacén" (309,3%) y "Lácteos" (276,4%).

Las perspectivas comerciales también son sombrías, con el 46,8% de los encuestados indicando que su nivel de ventas es malo, la peor cifra registrada en las bases estadísticas del Indec. Además, el 45,2% cree que la situación empeorará en los próximos tres meses.

En este contexto, Daniel Arroyo, diputado nacional de UxP y ex ministro de Desarrollo Social, expresó su preocupación por el endeudamiento de las familias para hacer frente a la crisis económica. Destacó que este fenómeno, antes observado principalmente en los segmentos más pobres, ahora afecta también a la clase media. Arroyo propuso medidas para aliviar esta situación, incluyendo la condonación de deudas una vez pagadas al doble de su valor original.

Por otro lado, el acceso a tarjetas de débito y crédito varía significativamente entre los hogares argentinos, con el 59% teniendo al menos una tarjeta de débito, el 46% al menos una tarjeta de crédito y el 10% al menos una tarjeta vinculada con cadenas comerciales. Sin embargo, el 26% de los hogares no posee ningún tipo de tarjeta.

Los hogares beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo (AUH) dependen en mayor medida de préstamos familiares, uso del fiado, créditos de prestamistas y préstamos de ANSES para cubrir sus necesidades, lo que refleja la dificultad económica que enfrentan estos grupos vulnerables.