Las embajadas de Israel y Estados Unidos sufrieron amenazas de bomba
Afortunadamente y luego de exhaustivas búsquedas por parte de los equipos de seguirdad, se determinó que no había artefactos explosivos.
En la mañana de este miércoles, dos embajadas en Buenos Aires, recibieron amenazas de bomba a través de correos electrónicos, según informaron las autoridades. Las embajadas afectadas fueron las de Israel y Estados Unidos, ubicadas en los barrios porteños de Monserrat y Palermo, respectivamente. Afortunadamente, después de exhaustivas inspecciones realizadas por el escuadrón antibombas de la Policía Federal Argentina en ambas sedes diplomáticas, se determinó que no había artefactos explosivos.
La amenaza en la Embajada de Israel fue denunciada por el jefe de seguridad de la embajada ante la Comisaría Vecinal 1D de la Policía de la Ciudad. Según fuentes policiales, el correo electrónico contenía un mensaje escalofriante que decía: “Pusimos una bomba y vamos a matar a todos los judíos”.
Ante esta amenaza, se movilizaron efectivos del Departamento Unidad de Investigación Antiterrorista (DUIA) y del equipo de Explosivos de la Policía Federal Argentina. Realizaron inspecciones exhaustivas en el edificio de la embajada, ubicado en Avenida de Mayo al 700, y afortunadamente, no se encontró ningún artefacto explosivo. Como medida preventiva, se cortó el tráfico en ese tramo de la avenida.
De manera similar, la Embajada de Estados Unidos también recibió una amenaza a través de correo electrónico, la cual fue denunciada por el jefe de seguridad de la embajada ante la Comisaría Vecinal 14C. Nuevamente, las autoridades movilizaron a expertos de la Policía Federal Argentina, quienes establecieron un perímetro de seguridad alrededor del edificio diplomático ubicado en avenida Colombia y Cerviño, en el barrio de Palermo. Las inspecciones realizadas confirmaron que no había ningún artefacto explosivo presente.
En ambos casos, la Justicia Federal de turno inició investigaciones por “intimidación pública”, según informaron los voceros de las autoridades.