La danza del vientre o danza árabe egipcia es una evolución de las tradicionales danzas de Oriente Próximo, conocida actualmente como danza oriental o raqs sharqi y practicada por mujeres de todo el mundo. La profesora platense Valen Blando contó al programa Salvando las Distancias, de Radio La Plata 90.9 FM los beneficios que aporta a la salud y algunos secretos de este arte milenario.

“Hablar de danza árabe egipcia implica enfatizar en la importancia de su origen y su antigüedad, para que se valore su aspecto tradicional, más allá de que podamos enseñar escenas coreográficas que luego son trasnformadas por el estilo de las alumnas”, comenzó explicando Valen. Y continuó: “Creemos que permite conectar con nuestras raíces, ya que nos muestra los secretos que tenían las mujeres que la practicaban. Por eso permite sanar eso que tiene oculto”.
Es que pese a la escasa evidencia histórica sobre sus orígenes, se la puede rastrear en el Antiguo Egipto cuando era ejercida por mujeres esclavas como forma de seducción, para luego formar parte de los entretenimientos sociales de las sociedades islamizadas medievales.
Esta simbiosis entre “arte y biología”, como enfatiza Valen, dio como resultado una danza muy básica, casi sin desplazamientos y con movimientos principalmente de pelvis, que como destaca la docente, “rinde culto a la fertilidad humana y pero también de todos los seres vivos”. Por eso se considera que imita los movimientos del parto.
Otro aspecto que trae aparejada la práctica de la disciplina son las mejoras que aporta a la salud corporal, ya que “beneficia la postura, la movilidad, flexibiliza y tonifica”, enumeró.
Valen Blando actualmente da clases online los días miércoles y está pronta a crear una formación más amplia de 4 años de duración.
