UATRE denuncia la intervención de la Secretaría de Trabajo y defiende la libertad sindical
La organización asegura que esta medida busca intervenir en la vida interna del sindicato y amenaza la libertad sindical de sus afiliados.
La Unión Argentina de Trabajadores Rurales y Estibadores (UATRE) reafirmó la validez del Congreso realizado en Puerto Madryn, destacando que “sesionó válidamente con la presencia de 540 congresales acreditados conforme a nuestro Estatuto”. Según la organización, la suspensión dispuesta por la Secretaría de Trabajo, que se notificó con menos de 24 horas de anticipación, fue calificada como “ilegal y arbitraria”.
UATRE argumenta que la suspensión se basó en la “falta de resolución por parte de la misma Secretaría de Trabajo de unas pocas impugnaciones”, originadas por un grupo minoritario vinculado al diputado nacional de La Libertad Avanza, Pablo Ansaloni. Este grupo, según el comunicado, fue derrotado en las elecciones internas de 2022 en Bahía Blanca.
Natalia Sánchez Jauregui, Secretaria de Organización de UATRE, expresó: "La libertad sindical se garantiza respetando el Estatuto y no permitiendo al Gobierno de turno que lo transforme en letra muerta". En su intervención, también añadió que “una pequeña minoría, compuesta en su mayoría por personas que ni siquiera son afiliadas, no puede alterar el normal funcionamiento de un sindicato con cientos de miles de afiliados".
El Congreso de Puerto Madryn, en el que participó la organización, aprobó por unanimidad todas las decisiones adoptadas por la conducción de José Voytenco. Sánchez Jauregui comentó que la resolución de la Secretaría de Trabajo busca “intervenir en la vida interna del sindicato, desconociendo el Estatuto y los derechos democráticos de las y los trabajadores rurales”.
La Secretaria de Organización también opinó sobre las intenciones de aquellos que cuestionaron la validez del Congreso, asegurando que “la suspensión fue arbitraria e ilegal porque buscaba llevarnos a la parálisis institucional, que es lo que quieren los opositores internos como Ansaloni, Andrada, Petriatti y Castro”.
UATRE se ha mostrado firme en su postura de rechazo, advirtiendo sobre el peligro que representa permitir que “cualquier minoría disconforme, con la complicidad del poder de turno, altere ilegalmente el normal funcionamiento de una organización sindical”.
Finalmente, Sánchez Jauregui concluyó, remarcando su confianza en la justicia: “No creo que la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo convalide una maniobra ilegal y autoritaria como la intervención, porque de lo único que se trata es de la validez o nulidad del Congreos de Puerto Madryn y no de hacer cesar mandatos de un Secretariado Nacional electo válidamente hasta fines de 2026”.
En este contexto, UATRE se mantiene en “estado de alerta y movilización en defensa de la LIBERTAD SINDICAL (ART 14 BIS) y la voluntad de sus afiliados”.
