La triste revelación de Pepe Mujica sobre su enfermedad: "Estoy condenado, hasta acá llegué"
El ex presidente uruguayo José Mujica reveló que el cáncer de esófago que enfrentó se ha extendido a su hígado, descartando nuevos tratamientos debido a su delicado estado de salud.
El ex presidente uruguayo José Mujica atraviesa uno de los momentos más difíciles de su vida. Tras haber enfrentado con éxito un cáncer de esófago mediante 32 sesiones de radioterapia, la enfermedad ha regresado con mayor fuerza. En una reciente entrevista, Mujica reveló que el cáncer se ha extendido a su hígado, complicando seriamente su estado de salud.
“El cáncer en el esófago me está colonizando el hígado. No lo paro con nada. ¿Por qué? Porque soy un anciano y porque tengo dos enfermedades crónicas. No me cabe ni un tratamiento bioquímico ni la cirugía porque mi cuerpo no lo aguanta”, explicó con la franqueza que lo caracteriza.
A sus 88 años, Mujica ha decidido no someterse a nuevos tratamientos y ha pedido a sus médicos que no prolonguen su sufrimiento. “Que me pichicateen y cuando me toque morir, me muero. Así de simple como te lo digo. Estoy condenado, hermano. Hasta acá llegué”, declaró con serenidad.
Desde su chacra en Rincón del Cerro, donde vive junto a su esposa, Lucía Topolansky, Mujica enfrenta la enfermedad trabajando en el campo mientras su cuerpo se lo permita. La entrevista con Búsqueda sirvió como una despedida tanto para sus compatriotas como para sus compañeros políticos. “Lo que quiero es despedirme de mis compatriotas. Es fácil tener respeto para los que piensan parecido a uno, pero hay que aprender que el fundamento de la democracia es el respeto a los que piensan distinto. Por eso, la primera categoría son mis compatriotas y de ellos me despido. Le doy un abrazo a todos”, dijo emocionado.
A su barra política también le dedicó palabras de agradecimiento, asegurando que su rol activo terminó hace tiempo. “Ahora, tengo mis simpatías y cuando puedo dar una manito, la doy. Pero no soy un viejo consultor, que me tienen que pedir permiso”, expresó. Asimismo, dejó en claro que no dará más entrevistas ni hará apariciones públicas. “Lo que pido es que me dejen tranquilo. Que no me pidan más entrevistas ni nada más. Ya terminó mi ciclo. Sinceramente, me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso”, afirmó.
Aunque se ha mantenido alejado de la política diaria, Mujica tuvo un papel clave al respaldar la candidatura de Yamandú Orsi, quien asumirá la Presidencia de Uruguay el próximo 1 de marzo. A pesar de ello, Mujica prefiere concentrarse en los recuerdos de su vida. “El principal premio que me dio la vida es que estoy a cuatro meses de cumplir 90 años. Mirá la vida que he tenido. Es un desastre”, comentó con su característico humor.
Hoy, Mujica pasa sus días recorriendo su chacra en tractor y preparando todo para las generaciones futuras. El predio, registrado a nombre de Lucía Topolansky, será heredado por su sector político. Incluso adquirió un nuevo tractor, valorado en 28 mil dólares, “para que los que vengan tengan fierros nuevos”.
Consciente de que su final se aproxima, el ex presidente ya ha manifestado su deseo de ser enterrado en su chacra, junto a su fiel compañera, la perra Manuela. Así, José Mujica se despide con la humildad y la grandeza que lo han convertido en un referente para millones de personas.