Juegos Bonaerenses: Proponen institucionalizar la competencia anual que une a la Provincia
El diputado Diego Garciarena presentó la propuesta que además incluye la creación de un registro histórico que conserve datos de cada edición, consolidando el impacto cultural y deportivo del certamen.
El diputado Diego Garciarena, líder del bloque UCR-Cambio Federal, presentó recientemente un proyecto de ley para formalizar e institucionalizar los Juegos Bonaerenses, la competencia provincial que se celebra de manera ininterrumpida desde 1992 y permite a niños, jóvenes, adultos mayores y personas con discapacidad representar a sus municipios en más de 100 disciplinas deportivas y culturales.
La iniciativa de Garciarena propone reconocer a los Juegos Bonaerenses como “competencia anual”, en lugar de mantener su estatus actual como programa estatal. Además, el legislador radical plantea la creación de un registro histórico de datos, destinado a ser una fuente de información confiable para la toma de decisiones. “Los Juegos Bonaerenses representan la principal competencia deportiva y cultural de la provincia de Buenos Aires y se desarrollan de manera ininterrumpida desde hace más de 30 años, promoviendo el deporte y la cultura como factor educativo e integrativo de salud física, psíquica y moral, y el derecho a la salud”, afirmó el autor del proyecto.
El proyecto también detalla la organización de los Juegos en tres etapas: la fase municipal, celebrada entre el 5 de mayo y el 30 de junio; la fase regional, que tuvo lugar el 1 de julio al 31 de agosto; y la gran final, que se realizará en Mar del Plata, como es tradición, a partir de este lunes 28. Garciarena, oriundo de Mar del Plata, destacó la evolución de esta competencia, que comenzó en 1997 con 17 disciplinas deportivas y 13 culturales dirigidas sólo a jóvenes, y que en años posteriores amplió su alcance para incluir adultos mayores, personas con discapacidad, estudiantes universitarios y terciarios, y personas trasplantadas.
Este año, los Juegos ofrecen una amplia gama de actividades, con 116 disciplinas que abarcan desde los populares Esports hasta deportes clásicos como el ajedrez y la pesca, además de expresiones artísticas como la poesía y el dibujo. “Los Juegos Bonaerenses fomentan la práctica del deporte como un derecho fundamental, contribuyendo al bienestar físico y mental de los participantes. Las actividades culturales permiten que los participantes expresen su creatividad y talento, fortaleciendo la identidad local y la diversidad cultural”, señaló el diputado.
En este sentido, los Juegos Bonaerenses se convirtieron en un evento emblemático de la provincia. A pesar de las recurrentes crisis económicas que llevaron a la suspensión de numerosos eventos culturales, la competencia provincial se ha mantenido. El entusiasmo es tal que muchos municipios del interior despiden a sus delegaciones con caravanas hasta las rutas. Para numerosos jóvenes, esta es su primera oportunidad de competir y de conocer el mar junto a sus compañeros y profesores, generando recuerdos duraderos.
Asimismo, Garciarena remarcó el impacto social positivo de los Juegos, destacando cómo esta competencia contribuye a la prevención de adicciones. “En un contexto de fuerte crecimiento de las plataformas de juego online y de la vulnerabilidad de las juventudes ante la ‘ciberludopatía’, integrar el deporte como una política pública en la estrategia de prevención de la ludopatía puede ser una medida eficaz para abordar no solo la adicción al juego, sino también promover un estilo de vida más saludable y sostenible”, indicó el legislador.
En relación con esta problemática, la Legislatura bonaerense ha recibido varios proyectos orientados a combatir la ludopatía. En octubre, el gobernador Axel Kicillof creó una Mesa Interministerial para la prevención del juego compulsivo en adolescentes. No obstante, los esfuerzos por consensuar una solución definitiva en la Legislatura aún están en proceso.
