"En las malas los empresarios se hacen los pelotudos", indicaron desde el SOECO
Gustavo Bustamante fue reelecto como Secretario General del Sindicato de Obreros y Empleados Ceramistas de Olavarría con el 70% de los votos. En un contexto de crisis económica y desafíos internos, destacó la unidad y el compromiso de los trabajadores para enfrentar las dificultades que atraviesa el sector.
Con casi el 70% de los votos, Gustavo "Pato" Bustamante fue reelecto como Secretario General del Sindicato de Obreros y Empleados Ceramistas de Olavarría (SOECO), en una elección marcada por una amplia participación de los trabajadores. "Estamos muy contentos. Había una lista opositora, no fuimos reelectos de la nada", expresó Bustamante, remarcando que conducir el sindicato implica "orgullo, responsabilidad y compromiso", cualidades que se reflejan en su gestión y que ahora deben "multiplicarse" con el apoyo renovado de los ceramistas.
El proceso electoral, que contó con un 96% de participación del padrón, se destacó por su transparencia, ya que "las elecciones se hicieron en el salón nuestro, no en el lugar de trabajo", según Bustamante. Este aspecto fue clave para asegurar que la votación se realizara en un entorno de confianza y control: "Fue todo transparente y que estén todos los fiscales de mesa juntos, las juntas electorales, los apoderados de lista, para que se fiscalice de manera más correcta". Además, resaltó el compromiso de los trabajadores, tanto con el sindicato como con sus compañeros, y agradeció a la Junta Electoral y a los fiscales de ambas listas por "un trabajo impecable".
En diálogo con Código Baires, Bustamante no dudó en criticar al actual Gobierno, señalando que "desde diciembre acá hemos sufrido el ataque de este Gobierno que vino a destruir todo". Explicó que, además de las dificultades que enfrentan los trabajadores ceramistas, dentro del sindicato se encontraron con "compañeros que estaban trabajando en contra de esta comisión directiva desde hace años". A pesar de estos desafíos, enfatizó que el apoyo de los trabajadores fue fundamental para evitar una intervención del sindicato el año pasado: "El apoyo de la gente hizo que no pasara".
Un panorama por demás desalentador
El líder sindical también reflexionó sobre el futuro del sector, señalando que "el panorama no es nada alentador". Según explicó, el cierre de la empresa LOSA fue solo una muestra de lo que podría venir: "Tenemos que estar preparados y principalmente unidos". Llamó a todos los trabajadores a dejar de lado las diferencias surgidas durante la elección: "Tenemos un Gobierno que sabemos cómo se maneja y los empresarios que están agarrados de la mano de este Gobierno para sacar provecho".
Bustamante remarcó la importancia de la unidad entre los ceramistas y la necesidad de enfrentar al Gobierno y algunos empresarios que, en su opinión, están perjudicando a los trabajadores: "Nuestro trabajo consistirá en unir a los trabajadores ceramistas, y hacerles entender que con quien tenemos que enfrentarnos es contra este Gobierno y algunos empresarios, no entre nosotros". A pesar de los desafíos, aseguró que los ceramistas son "trabajadores muy inteligentes", y expresó su compromiso de defender sus derechos.
El impacto de la crisis económica también se reflejó en las negociaciones salariales. "Nuestro salario perdió cerca del 30% de su valor", afirmó, detallando que la última paritaria cerrada en abril recién se cobró en agosto y que las correspondientes a mayo aún no se abrieron: "Tenemos un salario atrasado de 5 meses, es una locura lo que ha bajado el poder adquisitivo". Además, criticó duramente a los empresarios que, según él, "se hacen bastante los pelotudos. En épocas buenas te tiran migajas y cuando vienen las malas, las paga el laburante".
En cuanto a las expectativas para el futuro, Bustamante fue cauto. "Tenemos la esperanza de poder recuperar el salario perdido, pero va a ser muy duro", indicó, y agregó que dependerá en gran medida del estado del mercado, que en los últimos meses ha mostrado una tendencia a la baja en el sector de la construcción. "Vemos mes a mes cómo la construcción sigue cayendo", lamentó, advirtiendo que esto podría llevar a nuevas suspensiones y despidos.
Finalmente, Gustavo Bustamante reflexionó sobre la situación del movimiento sindical a nivel nacional, señalando su distancia con ciertos sectores de la CGT: "Salvo Pablo Moyano, que sigue compartiendo mi pensamiento y me parece que es el único que no se sienta a dialogar con este Gobierno". El secretario general insistió en la necesidad de que los sindicalistas hagan "una gran autocrítica" y comiencen a movilizarse: "Si no nos encolumnamos y empezamos a salir a la calle y hacer lo que tenemos que hacer, el camino será muy largo y muy duro".