El Gobierno anunció modificaciones en el Reprocann: ¿Cómo afecta a pacientes y ONG?
Estas modificaciones buscan mejorar el control y la transparencia, pero han generado preocupación entre los usuarios y cultivadores solidarios por sus posibles efectos en el acceso al tratamiento.
El Ministerio de Salud de la Nación implementó cambios significativos en el Registro del Programa Nacional de Cannabis Medicinal (Reprocann), con el objetivo de reforzar los controles y garantizar una mayor transparencia en la inscripción de usuarios y organizaciones.
La reciente resolución 3132/2024, publicada en el Boletín Oficial, establece nuevos criterios para regular el acceso al cannabis medicinal, con un enfoque particular en las ONG y los cultivadores solidarios. Esta medida busca recuperar el espíritu original del programa, que se centra en la investigación médica y científica del uso terapéutico de la planta de cannabis y sus derivados.
Uno de los cambios más destacados es la obligatoriedad de poseer una Diplomatura o Maestría específica en el uso medicinal de la planta de cannabis para poder inscribirse en el Reprocann. Este requisito se aplica tanto a los pacientes como a las organizaciones que desean ser reconocidas como cultivadoras autorizadas.
El Boletín Oficial también señala que las ONG que participen en el cultivo deberán estar debidamente registradas y habilitadas por las autoridades competentes de cada jurisdicción, y deberán notificar al municipio correspondiente sobre su objeto social relacionado con la salud y la investigación.
Los cultivadores solidarios, que anteriormente podían representar a varios pacientes, ahora verán su capacidad limitada a un máximo de dos personas, incluyendo a sí mismos. Este cambio representa una restricción significativa en comparación con las regulaciones anteriores, que permitían un mayor número de representados.
Además, las ONG deben cumplir con estrictos requisitos, como no tener antecedentes penales en su comisión directiva y presentar una lista detallada de los usuarios registrados en el Reprocann a quienes representarán. Las asociaciones también están obligadas a renovar anualmente su certificación de vigencia ante las autoridades correspondientes.
Estas nuevas normativas generaron preocupación entre pacientes y organizaciones que dependen del Reprocann para acceder al cannabis medicinal. Mariana Ríos, presidenta de la asociación civil Familias Cultivando, expresó su inquietud sobre los retrasos en las autorizaciones y renovaciones del Reprocann, que ya enfrentaban demoras antes de la implementación de estos cambios. Ríos advirtió que la acumulación de solicitudes pendientes, junto con las nuevas restricciones, podría llevar a un colapso del sistema, afectando gravemente a los pacientes que necesitan el cannabis medicinal para tratar sus patologías. “Muchos pacientes ya están abandonando el tratamiento por miedo a cultivar en la ilegalidad o por los altos costos del aceite comercial”, señaló.
Con estas nuevas disposiciones, el gobierno de Javier Milei busca establecer un control más estricto sobre el acceso al cannabis medicinal en Argentina, intentando regularizar el sistema. No obstante, estas medidas podrían restringir significativamente el acceso para quienes más lo necesitan, especialmente aquellos con recursos limitados.
El Ministerio de Salud anunció que convocará al Consejo Consultivo en los próximos días para trabajar en conjunto con los distintos actores involucrados en el cumplimiento de los objetivos de la ley 27.350 y su nueva resolución. Mientras tanto, la comunidad de pacientes y cultivadores solidarios enfrenta un panorama incierto, donde las nuevas normativas podrían transformar radicalmente el acceso al cannabis medicinal en el país.
