La oposición rechaza el decreto sobre los 100 mil millones de la SIDE
En la Cámara de Diputados los opositores “duros” y “dialoguistas” se unen para dar de baja la suba de $100.000 millones al organismo de inteligencia y piden discutir el financiamiento universitario mientras que en el Senado planean una sesión especial para aprobar una nueva fórmula de movilidad jubilatoria.
La oposición en el Congreso unirá filas para imponer límites con dos acciones de fuerte impacto político: En la Cámara de Diputados rechazará el decreto presidencial por el cual aumentó en $100.000 millones los gastos reservados de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
En paralelo, en el Senado buscará convertir en ley una nueva fórmula de actualización de jubilaciones, la cual es vista por el Gobierno como una seria amenaza al equilibrio fiscal.
“Los únicos dos decretos que son relevantes, son los dos del diseño de la Secretaría de Inteligencia y su financiamiento. Yo se que hay una mayoría armada, acá todos hablamos con todos, pero esto va a ocurrir de todas maneras, lo único que estamos discutiendo es (si sucede) una semana más o una semana menos”, sostuvo el diputado Nicolás Massot en la reunión de la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo antes de perder una votación para que los DNU 614/24 y 656/24 fueran tratados la semana próxima.
El primer decreto creó la nueva Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) y su subdivisión en cuatro agencias. El segundo aumenta su presupuesto en 100.000 millones de pesos y los declara reservados, es decir, sin control alguno por su carácter secreto.
En minoría en ambas cámaras, los libertarios solo cuentan (todavía) con sus aliados de Pro y difícilmente logren resistir la embestida de la oposición, decidida a incomodar al Gobierno forzándolo a vetar una ley que busca evitar la pérdida del poder adquisitivo de las jubilaciones mientras, en simultáneo, impulsa un aumento sideral de los gastos reservados para inteligencia.
A esta ofensiva se suma otra convocatoria a sesión, motorizada por una quincena de diputados de Encuentro Federal, la Coalición Cívica y del radicalismo, para rechazar el DNU que incrementa en $100.000 millones los gastos reservados de la SIDE.