Eskabe suspenderá "por tandas" al 30% de su personal para evitar despidos
La empresa marplatense tomó esta decisión frente a una marcada caída de las ventas y la producción, en medio de la preocupante situación que atraviesa la industria. Representantes del sector metalúrgico adelantaron que las suspensiones arrancarían la semana que viene y se extenderían por tres meses.
Por la fuerte recesión económica que afecta a diversos rubros productivos, la empresa marplatense Eskabe tomó la decisión de suspender "por tandas" a sus trabajadores tras una caída de las ventas del 50% y la consecuente dificultad para hacer frente a los costos de producción. Según comunicó la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), la medida apunta a que estas suspenciones "no se conviertan en despidos".
El secretario general del gremio, José Luis Rocha, adelantó que "estamos a punto de firmar las suspensiones que arrancarían la semana que viene por tres meses" y precisó que el personal suspendido por tanda rondará un índice de 30% de la planta. "Ya está armado el cronograma, van a cobrar el 80% del bruto, con lo cual le quedaría en el bolsillo a los trabajadores el 100% del neto" informó.
Rocha advirtió que "la situación no está bien, la industria está planchada y ya se empiezan a ver las consecuencias y las suspensiones. Tenemos algunas empresas que ya empezaron con despidos por goteo y algunas que están con intenciones de suspensiones que todavía estamos hablando".
Según señaló el gremialista, el acuerdo se producirá con la finalidad de que implique una medida "favorable para los trabajadores", a modo de evitar despidos, y que se espera que concluya a finales de septiembre para "que no tengamos que seguir con las suspensiones y que no sea grave".
La crisis industrial viene profundizándose en todo tipo de empresas a nivel provincial y nacional, frente a lo cual se multiplican los reclamos ante las medidas de Gobierno nacional, especialmente desde el sector metalúrgico.
En el caso de la empresa dedicada a la fabricación de calefactores, termotanques y cocinas, entre otros productos del rubro, vienen percibiendo una disminución de la actividad productiva consecuencia del menor poder adquisitivo de los consumidores, de quienes, según el gremialista, "no está al alcance hoy, en estas condiciones económicas que hay, renovar un calefactor. Si la gente tiene algún calefactor roto o dañado, van a intentar repararlo".
Vale mencionar que no es la primera vez que Eskabe adopta estrategias para hacer frente a la crisis, ya que hubo medidas similares en el 2019 y durante la pandemia, que también pusieron en alerta a los 120 trabajadores que conforman la planta.
"El temor está de acuerdo a lo que venimos manifestando. Cada día se hace más compleja la situación, con lo cual esperemos, y esto es un anhelo desde el gremio, que esto sea solamente una suspensión y no se transforme en un despido. Por la situación que nosotros vemos que va a pasar en los próximos seis meses" concluyó Rocha.