El Gobierno se empecina en no repartir los alimentos retenidos
Tanto Guillermo Francos como Patricia Bullrich expresaron su rechazo a la orden judicial que exige la distribución de alimentos retenidos, argumentando que la Justicia se está entrometiendo en la política social del gobierno.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, insistió en que el Gobierno apelará la medida judicial que le ordenó a la ministra de Capital Humano, Sandra Pettovello, distribuir los alimentos que se encuentran retenidos en dos depósitos. Francos explicó que, aunque Pettovello presentó un plan de distribución, lo hizo para no "caer en desobediencia" y anticipó que la orden de la Cámara Federal “seguramente será apelada”.
Patricia Bullrich también criticó la intervención judicial, asegurando que el juez Sebastián Casanello “se metió a hacer de almacenero”. Bullrich expresó su descontento diciendo que se siente "furiosa": “¿Qué hace el juez? ¿Hace política con los alimentos? No entiendo, esto es algo que no podemos aceptar".
El gobierno, de esta manera, defendió nuevamente a Pettovello y confirmó que seguirá con su estrategia de debilitar a las organizaciones sociales. Esta estrategia incluye el protocolo antipiquetero, auditorías a las políticas sociales del gobierno anterior, como la urbanización de barrios populares, y la presentación de denuncias judiciales contra los dirigentes de estas organizaciones.
La administración de Milei no planea corregir los errores en la distribución de alimentos, considerando que su prioridad es desmantelar a las organizaciones sociales para implementar cambios estructurales sin oposición en la calle, muchos de los cuales están contenidos en la Ley Bases que el Senado votará este miércoles.
Francos afirmó: “El gobierno está haciendo política social de manera diferente a la que se venía realizando”, y reiteró la acusación de que las organizaciones sociales roban, justificando así la decisión de Pettovello de no enviarles alimentos. “La Justicia detectó facturas truchas de este señor (Eduardo) Belliboni, que tanto protesta en los medios. Ese trabajo también lo hizo la ministra de Capital Humano. Separar la paja del trigo: esto es curro y esto es real".
Francos enfatizó: "Lo que es real se mantuvo y se incrementó, y lo que es curro, se cortó. Por eso protestan, porque se cortó el curro".
Bullrich también expresó su descontento con la actuación de la Justicia en la causa de los alimentos almacenados en los depósitos de Villa Martelli y Tafí, asegurando que "se metió a hacer de almacenera". Criticó la intervención judicial diciendo: “¿Qué es esto? Decide la Justicia cómo se reparten los alimentos en la Argentina", y cuestionó la capacidad de la Justicia para manejar la distribución de alimentos.
En recientes declaraciones con la prensa, Bullrich comentó que la Justicia debería supervisar si lo que se compró está correcto, pero no involucrarse en la distribución de alimentos. “¿Qué sabe cómo se reparten los alimentos la Justicia? Nos hicieron salir de urgencia, uno puede cometer un error, meter la pata, ser injusto. Llegar a una zona y que nos tomen un camión. No se hacen las cosas así, porque la Justicia te obliga”.
Sobre los fallos del juez Casanello, Bullrich añadió: "¿Qué sabe el juez, para no hablar de la Justicia, cómo se reparten los alimentos? Ese juez la semana anterior mandó a indagatoria a una cantidad de gerentes de la pobreza que se robaban los alimentos, y al otro día salió a decir ‘repartan los alimentos’, alimentos que no se vencían. Una de cal y una de arena".
La ministra también se mostró molesta con la iglesia, criticando la intervención de la Catedral y otras instituciones religiosas en la distribución de alimentos. “Ahora que están todos procesados e indagados apareció la Catedral con una mesa de comida, el juez pidiendo que reparta la comida… quiere decir que aparecieron todos a proteger a los gerentes de la pobreza".
Bullrich concluyó: "El hambre apareció el 10 de diciembre. Estoy furiosa porque no hay que hacer seguidismo de eso, hay que mirar las cosas con un poquitito más de distancia".
