Daniel Belinche: "No hay tarea docente que no sea política, pero de ahí a adoctrinamiento, hay un abismo"

En medio de un clima de tensiones sobre la educación superior, la Subsecretaría de Políticas Universitarias de la Secretaría de Educación de la Nación tomó la decisión de cancelar el envío de fondos al Centro Regional UNLP Espacio ESMA, calificándolo como un "centro de adoctrinamiento ideológico". 

Esta resolución, dirigida a la Universidad Nacional de La Plata y su rector, Martín López Armengol, generó un fuerte revuelo en el ámbito académico. Entre las carreras afectadas se encuentran Periodismo y la Facultad de Artes. Es por ello, que Daniel Belinche, decano de la Facultad de Artes, dialogó con Código Baires, detallando la situación y las preocupaciones del sector.

“Por el momento no nos llegó mucha información sobre la medida, aunque estamos totalmente en desacuerdo con el concepto y con la idea de pensar que existe algún tipo de clase o de tarea docente que no sea política; pero de ahí a adoctrinar, hay un abismo”, comenzó explicando Belinche.

En ese sentido, también manifestó: “Más allá de que en nuestras carreras los programas son distintos con otras facultades, la perspectiva política es la misma. Ayer escuchamos a un diputado hablar de que no tiene que existir la educación obligatoria y que si los padres necesitan que los chicos trabajen, deberían poder no ir a la escuela, y me parece que estas medidas y estos discursos hay que verlos de manera organizada, no son hechos aislados”.

“Hay una articulación entre la quita de presupuestos a organismos estatales, más el despido de empleados, científicos y artistas, más la concepción de que no es necesaria la educación obligatoria, más el intento de disolución simbólica de lugares como la ESMA. todo con la justificación de que en estos espacios se adoctrina, cuando ese argumento es insostenible”, completó el decano.

En cuanto a los pasos a seguir, Belinche adelantó: “La respuesta, no institucional porque todavía no recibimos notificación, está totalmente en contra. Rechazamos la medida en su materialidad y en sus argumentaciones”.

En esa misma línea, expresó: “Nosotros enseñamos música, cultura y creo que también vienen por eso. Cosas así ya pasaron en la dictadura, cuando en nuestra facultad cerraron la carrera de cine porque venía con una impronta de los 70’ e incluso la carrera de piano, que era más tradicional”.

Por último, el decano de la Facultad de Artes expuso sus preocupaciones de cara a lo que se viene: “Estamos muy preocupados, aunque hemos tratado de llevarles tranquilidad a los docentes y estamos a la espera de tener una noción más clara de cuáles son los alcances de esta medida”.

“Creo que todo es parte de una discusión compleja que circula por todas partes y no solo en los medios de la Universidad. Una de las formas de debatir es mantener las universidades abiertas, difundir nuestras producciones y nuestros logros. Nuestra facultad tiene editorial propia, 53 carreras, 600 cátedras, 500 investigadores, programas audiovisuales, clases de textos y producciones artísticas asombrosas. Aunque lo más importante, es seguir dándole clases a los 25 mil estudiantes que tenemos en la facultad en este momento”, agregó.

Para concluir, indicó: “Este año tuvimos 5.300 inscriptos. Hay algo en la circulación intuitiva de los momentos de crisis, que lleva a que los jóvenes sigan eligiendo este camino, a pesar de los prejuicios que hay en carreras como las nuestras”.