Echarren y su indignación con Milei por el despido de 150 obreros
Francisco Echarren expresó su indignación por la paralización de una obra de viviendas en su municipio y responsabilizó a Javier Milei, presidente, por los despidos de 150 trabajadores.
El intendente de la localidad de Castelli, Francisco Echarren, mostró su bronca contra el presidente Javier Milei por la paralización de una obra pública en su municipio que resultó en el despido de 150 trabajadores. El intendente peronista expresó su enojo y desilusión en una declaración pública.
"No era campaña del miedo", manifestó Echarren con indignación al denunciar la detención de la obra pública nacional en su distrito, específicamente un proyecto de viviendas. Castelli, parte de la Quinta sección electoral, se convirtió en las últimas semanas en uno de los epicentros de la crítica hacia la gestión de Milei, especialmente en relación con la parálisis de las obras y los altos precios de los alimentos.
El mandatario local afirmó que, desde el Gobierno Nacional "frenan la obra pública, echan a 150 vecinos y paran una obra donde 208 familias de Castelli iban a tener su casa propia". Explicó que, durante la detención de la obra, se llevaron el obrador, y los empleados, presenciando la situación, no pudieron contener las lágrimas. "Da mucha bronca", concluyó Echarren.
Esta no es la primera vez que el intendente se pronuncia sobre el tema. En diciembre del año pasado, propuso organizar un "piquete" como forma de protesta contra la paralización de la obra pública. En ese momento, hizo un llamado a la unidad de los intendentes de todos los partidos políticos para evitar la interrupción de proyectos que dejarían "un cementerio de obras abandonadas con miles de vecinos despedidos". Insistió en la importancia de detener la "locura" que afecta no solo a los trabajadores, sino también al comercio local.
Echarren destacó la relevancia de la obra pública para las ciudades y municipios, advirtiendo sobre la posibilidad de hasta 300 mil despidos solo en la Provincia de Buenos Aires y 500 mil en la ciudad. Llamó a los intendentes a unirse en este reclamo, subrayando que será un "golpe letal" para la gente y los distritos locales si no se toman medidas para detener la situación.
