Jujuy: El orden represivo que podría extenderse a todo el País

Mientras la policía jujeña reprimía fuertemente a aquellas personas que salieron a las calles a manifestarse en contra de la reforma constitucional, Horacio Rodríguez Larreta, nombraba al gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, como su candidato a vicepresidente.

"Para mí es un gran orgullo que Gerardo Morales sea quien me acompañe como candidato a vicepresidente para cambiarle la vida a todos los argentinos. Es un tipo de acción, de ir al frente, de hacer. Gobierna una provincia muy importante de la Argentina y le cambió la vida a cada uno de los jujeños. Hoy tienen más trabajo, mejor educación. Las regalías del litio las dedican a construir escuelas", declaró Larreta.

El jefe de Gobierno de Caba, anunció que Morales sería su compañero de fórmula tres días después de que un joven de 17 años perdiera un ojo a causa de los balazos de goma que recibió en la cara por parte de la policía jujeña, sin embargo el Precandidato presidencial de Juntos por el Cambio se limitó a elogiar la “valentía” del Mandatario jujeño.

En ese marco, surge el cuestionamiento de sí el orden represivo aplicado Jujuy podría llegar a formar parte de la agenda política de Juntos por el Cambio, la cual sería aplicada a nivel nacional en caso de un triunfo electoral.

Sobre esto, Ernesto Alonso, integrante de la Comisión Provincial por la Memoria (CPM) y socio fundador del CECIM (Centro de ex Combatientes de Islas Malvinas) declaró que los hechos de violencia vividos en Jujuy responden a “un modelo político represivo que está al servicio de un modelo económico que quiere dejar afuera los hermanos de la provincia de Jujuy”.

“Lo peor de todo es que esto se quiere llevar a la escala nacional”, añadió.

“Lo que se evidencia en Jujuy es una regresión a épocas a las que los argentinos no queremos volver a pasar, esta represión que vemos todos los días, este accionar de persecuciones y encarcelamientos está relacionada por un proyecto político que se vivencia en lo que fue la reforma de la Constitución Provincial”, declaró el integrante de la CPM.

Dicho modelo político es el que impulsan desde Juntos por Cambio, en la medida en que los dirigentes que forman parte del espacio se han pronunciado en varias oportunidades a favor de utilizar la “mano dura” con la población.

Por ejemplo, al momento en el que se estaba llevando a cabo la represión, el diputado y candidato a senador nacional por la lista que encabeza Horacio Rodríguez Larreta, José Luis espert, no solo elogió el hecho de que la reforma constitucional jujeña limite el derecho a huelga, sino que aseguró "en Jujuy se evitó un intento de golpe de Estado sin derramar una gota de sangre".

“En esa constitución se ponen límites, no al derecho de huelga sino a la protesta social. La protesta social no puede cortar calles, no puede cortar rutas, y eso me parece muy sano y muy razonable, porque si no estamos perjudicando el derecho a ejercer una industria lícita, al que tiene que transitar, al que tiene que transportar su mercadería y no puede”, había manifestado Espert.

Con respecto al apoyo que recibió Gerardo Morales por parte de los demás miembros de Juntos por el Cambio, Ernesto Alonso, declaró: “El grado de impunidad y la voracidad con se que está llevando a cabo este modelo es muy preocupante, porque estamos en un momento de renovación de autoridades y hay una expresión política que promueve este modelo exclusivo dejando gente afuera”.

Los paralelismos entre la represión en Jujuy y la dictadura

A pesar de que desde Juntos por el Cambio se pregone constantemente que su espacio trae ideas nuevas para “terminar con 70 años de peronismo”, en el accionar de la policia y del poder judicial jujeño durante y después de las protestas se evidencian varios paralelismos con el orden represivo aplicado décadas atrás durante la última dictadura cívico eclesiástico militar.

En ese marco, recientemente dio su testimonio Camila Müller, una docente que declaró haber sido tortura y abusada sexualmente por tres personas que anteriormente la había perseguido e intentado atropellar a bordo de un vehículo ploteado con el logo de la policía jujeña, pero sin patente.

“Me ataron las manos a la espalda, me pusieron algo en el cuello y me empezaron a ahorcar y me cortaban la respiración. El hombre me cortó la respiración varias veces, en la misma técnica yo sentía que estaba a punto de morir y ahí me soltaba”, detalló la docente que había participado de las marchas contra la reforma constitucional.

Con respecto a este accionar, Alonso hizo una comparación con lo sucedido durante la “Noche del Apagón”, ocurrida el 20 de julio de 1976, cuando se llevaron a cabo una serie de secuestros en la localidad de Libertador General San Martín de Jujuy, la mayoría de los secuestros fueron efectuados con vehículos de la empresa azucarera Ledesma y en el marco de cortes del suministro eléctrico.

En este sentido, el Secretario de Derechos Humanos de CECIM, detalló que en ambos casos “el objetivo fue el mismo”, es decir acallar a los trabajadores, con la diferencia de que hoy “no se puede utilizar el terrorismo de Estado de la misma forma que lo utilizo la dictadura militar”, por lo que recurren a otros métodos.

Cabe recordar que este jueves 20 de julio se llevará a cabo una marcha nacional en contra de la represión en Jujuy.