Nepotismo: la mano derecha de Salvador montó su clan en Chivilcoy

[caption id="attachment_74329" align="aligncenter" width="677"] Izq. a der.: Leandro (hijo), Luis, Julio (hermano) y Guillermo (hermano)[/caption]

Se trata de Luis Blanco, director del IOMA, que influyó en ambas cámaras legislativas para nombrar dos hermanos y un sobrino como empleados administrativos. Uno de sus hijos, Leandro, es senador por la cuarta sección y los otros dos, prestadores de la obra social de los estatales, no han tenido inconvenientes para cobrar, a pesar de los atrasos con el resto de los profesionales.

La información contrasta con las proclamas del oficialismo en contra de la designación de familiares y amigos en la administración pública y compromete directamente al vicegobernador Daniel Salvador, que habría sido el facilitador para que Blanco montara su estructura familiar.

El epicentro del entramado tiene lugar en Chivilcoy y como protagonistas de primer término a los hermanos del directivo de IOMA: Guillermo y Julio.

El primero, en una situación de extrema delicadeza de la obra social de los empleados provinciales, en la que hay profesionales que no cobran prestaciones desde octubre de 2017 y afiliados a los que se les rechaza la autorización para realizar exámenes de rutina, fue beneficiado con una cobertura integral por una enfermedad oncólogica, que estaría valuada en más de $500 mil.

También es dueño de una inmobiliaria en Chivilcoy, ubicada en Avenida Ceballos 133, y gracias a suscribir contratos de locación con la Cámara de Diputados, percibe más de $24 mil mensuales. Germán, uno de sus dos hijos, fue nombrado como administrativo en el Senado gracias a la influencia de su sobrino Leandro Blanco, representante legislativo por la cuarta sección electoral desde 2017.

Julio, el otro hermano de Luis, también fue beneficiado en el Honorable Senado con un cargo y, junto a Leandro, atienden un estudio jurídico de Chivilcoy, y según las versiones, casi nunca se los ve por los pasillos de la Legislatura.

Los hermanos del senador, Federico y Rodrigo Blanco, dueños del Instituto Hemodinamia de Chivilcoy, no son ajenos a la amplísima red: gracias a sus lazos de sangre con el director de IOMA, son de los pocos prestadores de la provincia que reciben sus honorarios en tiempo y forma.

[caption id="attachment_74330" align="alignnone" width="348"] Dario Bastian, socio de Guillermo Blanco[/caption]

El entramado no termina ahí, porque la familia contaría con un allegado que también tiene un cargo en la Cámara alta de la provincia. Su nombre es Dario Bastian y es socio de Guillermo Blanco en la inmobiliaria de Avenida Ceballos 133.